Habitaciones en una casona típica de Cantabria y en una antigua escuela.
Platos cántabros con opciones vegetarianas y veganas.
Espacios ideales para vuestros perretes.
Zona con chimenea y TV para relajarse.
Senderismo, ciclismo y más en los Picos de Europa.
Comienza el día con productos frescos y locales.
Pasamos unos días muy tranquilos y relajados en este entorno tan especial, cerca de las montañas cántabras. Nos gustó el trato amable, cercano y conversador, al tiempo que respetuoso de Luís, su anfitrión. Los desayunos, cada día diferentes, sorprendentes y deliciosos, siempre con la descripción de Luís de un nuevo sitio maravilloso para descubrir. Un delicioso lugar para la tranquilidad y para volver a repetir.
Alberto
Reserva